El corazón nos lleva,
tal vez de la mano y, sin darnos cuenta,
aunque no le oigamos,
aunque el rumor de las voces nos oculte su amparo.
Él hace que estalle en el pecho un milagro,
que adoremos aún aquello que nos hace daño.
El corazón sabe tanto,
que escribe cada frase que estamos negando
y entierra entre sus capas
mil secretos guardados
No hay comentarios:
Publicar un comentario