En la esperanza se ha detenido mi noche.
LLegas hasta aquí como un barco sin timón,
abrazando cada duda
con las respuestas
escondidas en tus labios...
En ellos me pierdo,
navego en tu cuerpo hasta alcanzar
la orilla...
solo nos ata una promesa.
Cuando llegue hasta ti,
volará libre mi deseo
y en tus brazos amarraré
hasta que el fin de nuestro tiempo
escuche tu voz despedirme,
y mi ultima mirada te encuentre.